¿Por qué el otoño es el momento perfecto para crear nuevos hábitos de aprendizaje?
- Daniela Lochan

- 3 nov
- 4 Min. de lectura
A veces, los cambios pueden ser difíciles. Cuando encontramos una rutina o un hábito que nos gusta, tendemos a aferrarnos a él, a esas costumbres que nos hacen sentir cómodos, independientemente de si nos benefician o no. Cuando llega un cambio que amenaza con modificar nuestras rutinas, podemos sentir mucha ansiedad. Sin embargo, el otoño es una época maravillosa para ayudar a nuestros hijos a establecer buenos hábitos de estudio y lectura.

Las estaciones nos recuerdan que el cambio es hermoso. El otoño en Long Island, Nueva York, es una hermosa estación de cambios. Las hojas cambian de color y el follaje puede ser impresionante. El clima también cambia a medida que la temperatura comienza a bajar. El año escolar comienza casi al mismo tiempo, por lo que las familias retoman o comienzan rutinas más estructuradas que las que tenían durante el verano. Personalmente, me encanta el verano. Cada año espero con ansias esos días calurosos. Sueño con ir a la playa y a la piscina, disfrutar de interminables cantidades de sandía y quedarme despierta hasta tarde viendo buenas películas con mi familia. Sin embargo, cuando me doy cuenta de que se acerca el otoño, empiezo a sentir un poco de ansiedad porque sé que el verano está terminando. Pero una vez que empiezo a notar cómo las hojas cambian de tonalidad y cuando siento esa brisa que susurra dulces melodías, me recuerdo a mí misma que el cambio es algo hermoso.
De la misma manera, nuestros hijos pueden acostumbrarse a sus horarios de verano. Por eso, durante el año escolar, quizás no estén muy entusiasmados por retomar sus rutinas escolares. Pienso especialmente en aquellos alumnos a quienes les cuesta más retener información o procesar lo que aprenden. Pienso en los alumnos que odian leer porque están en tercer grado pero aún no leen con fluidez. El inicio del año escolar puede ser un reto para los estudiantes. Por eso, el otoño es ideal para establecer una rutina de estudio y lectura para sus hijos.
1. Una temporada de nuevos comienzos

Aunque el curso escolar ya ha comenzado, el otoño aún se siente como un nuevo comienzo. El descenso de las temperaturas y el hecho de que tengamos que sacar la ropa de abrigo del armario contribuirán a que la estación tenga esa sensación de nuevo comienzo.
Dado que el año escolar acaba de empezar (o incluso si no lo hubiera hecho), este nuevo comienzo nos brinda una excelente oportunidad para reforzar buenos hábitos en nuestros hijos. Durante el verano, probablemente tuvieron más tiempo para ver la televisión y pasar tiempo con sus amigos. Con la llegada del otoño, pueden introducir la rutina de leer juntos durante 20 minutos. Pueden elegir una buena novela o un libro que les guste escuchar y leerles después de cenar. Sus hijos harán preguntas, y ustedes podrán explicarles y enseñarles vocabulario nuevo (incluso pueden aprender las palabras nuevas con ellos si el inglés no es su lengua materna). Este tiempo permitirá que se cree un vínculo especial entre ustedes. Si su hijo aún no lee con fluidez, esto le ayudará a desarrollar su comprensión lectora.
2. Estructura y rutina de retorno

Como ya se mencionó, el verano ofrece flexibilidad y espontaneidad. Sin embargo, una vez que comienza el año escolar, nuestros hijos necesitan una rutina constante. La previsibilidad les ayuda a desarrollar la constancia.
Esta transición al otoño también puede ayudarnos a brindarles a nuestros hijos la constancia que necesitan. Si queremos fomentar buenos hábitos de estudio, podemos reservar momentos en su horario para que repasen sus apuntes escolares o practiquen las matemáticas con plataformas como IXL o iReady. Esto les enseñará que el aprendizaje y la práctica también pueden darse fuera del horario escolar. Si saben que cada día a las 5:30 pm usarán IXL durante 15 minutos, después de un par de semanas, se convertirá en una nueva rutina de estudio que les ayudará a mantenerse al día con sus estudios.
3. Evitar la caída de mitad de año

Muchos estudiantes suelen empezar con mucha energía, pero luego pierden el ritmo cuando llega el invierno. Al fin y al cabo, el invierno también trae consigo las vacaciones, y esos meses pueden resultar agobiantes, y las rutinas se pierden entre las actividades propias de estas fechas.
Por eso, crear hábitos en otoño ayudará a prevenir esa bajada de motivación. Cuando nuestros hijos saben qué se espera de ellos y asumen la responsabilidad, les resultará más fácil seguir haciéndolo durante todo el año, incluso en los meses más ajetreados.
4. Formas prácticas de crear hábitos este otoño
¿Cómo puedes asegurarte de que tu hijo adquiera nuevos hábitos de aprendizaje este otoño?
Prueba con estas opciones:
1. Establezca un tiempo de lectura constante de 15 minutos cada noche.
2. Crea un espacio tranquilo y dedicado a hacer la tarea.
3. Utilice los fines de semana para actividades de aprendizaje divertidas y sin presión (cocinar = fracciones, paseos por la naturaleza = habilidades de observación).
4. Celebra los pequeños logros para mantener el impulso. Dale retroalimentación a tu hijo y anímalo a seguir adelante.
¡Aprovechemos la temporada del crecimiento!
Al comenzar este otoño, aprovechemos este hermoso recordatorio de que el cambio puede ser positivo. Hablen con sus hijos sobre la importancia de establecer rutinas que les ayuden a ser más independientes. En Accelerate Tutoring, nos encanta ayudar a las familias a crear hábitos de aprendizaje sólidos.
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